Aventuras en los árboles: una nueva forma de ocio
Trepar a los árboles siempre ha estado entre las grandes aficiones de los niños. Sin embargo, en los últimos tiempos se ha dado una nueva vuelta de tuerca a este pasatiempo hasta transformarlo en toda una aventura que pueden disfrutar tanto niños como adultos. Circuitos para recorrer las copas de los árboles, plataformas, tirolinas, puentes colgantes… Los distintos parques multiaventura que han surgido en torno a esta nueva afición ofrecen experiencias lúdicas y deportivas a todas aquellas personas que no padezcan vértigo.
Generalmente, los parques multiaventura cuentan con circuitos de distintas dificultades para que cualquier niño a partir de cierta edad pueda acceder a ellos. Por supuesto, la seguridad es primordial, y los pequeños siempre han de ir asegurados con un arnés, casco y demás elementos protectores que cada recorrido precise. A menudo, un circuito paralelo a ras de suelo está disponible para que los padres o acompañantes puedan seguir los pasos de los niños a poca distancia, si no desean realizar el circuito en altura.
La diversión está asegurada, pero también el contacto con la naturaleza. Caminar entre las copas de los árboles es una manera diferente de conocer un bosque, observar su fauna, respirar el aire limpio del entorno y ver todo desde otra perspectiva. Además, ayuda a perder el miedo a las alturas.
A nivel deportivo, el arborismo ejercita muchas habilidades como la fuerza, el equilibrio o la concentración. Trepar por cuerdas, deslizarse en tirolinas, escalar redes, saltar de una plataforma a otra… Los niños van adquiriendo seguridad en sí mismos mientras se divierten en un entorno desafiante pero seguro. Aprenden a superar sus límites y buscar soluciones a los nuevos problemas que plantea cada recorrido. Sin duda, una propuesta a tener en cuenta para disfrutar de la naturaleza con los más pequeños.