¡Ensuciarse las manos con mucho arte!
Si tienes en casa niños pequeños ya sabrás de qué estamos hablando cuando decimos que uno de sus mayores disfrutes es experimentar con todos los sentidos (sobre todo con el tacto) tocando todo lo que está a su alcance. Es por ello, que una de sus actividades favoritas es pintar con las manos, una actividad de lo más divertida para niños de más de 6 meses. ¡Si los tuyos tienen esa edad, no lo dudes!
Algo importante a tener en cuenta antes de poner a los peques frente a las pinturas es vigilar que éstas sean aptas para los niños, es decir, que sean no tóxicas en caso de ingestión (nunca se sabe…). En muchas tiendas de manualidades se pueden comprar, pero si eres más de “hacerlo en casa” aquí os dejamos una sencilla receta:
Pintura comestible para niños:
200 gramos de sal.
200 gramos de harina.
200 gramos de agua.
Colorante para comida.
Se mezclan todos los ingredientes en un recipiente hondo y se van guardando por colores en pequeñas botellas o botes cosméticos vacíos o en estuches de acuarelas para poder usarlas varias veces.
Es alucinante cómo, con un poco de imaginación, unas simples huellas de manos (y de pies) pueden convertirse en cientos de cosas diferentes. Por eso, aprovechamos para que esta actividad tan genial sea a la vez una experiencia educativa.
Podemos ayudarles a pintar muchos animales distintos. Dejad que ellos hagan la base y luego ayudadles a hacer los detalles de cada animal. ¡Cuánto más hagan ellos mejor!
Se puede dibujar mucha fauna, pero también flora, como árboles y flores.
También podemos probar con el abecedario, ropa, comida, personajes fantásticos… ¡todo lo que se os ocurra!
¡Ah!, y antes de empezar no os olvidéis de preparar bien el lugar donde vayáis a pintar. Poned manteles, plásticos o periódicos viejos para evitar dejar todo hecho un cuadro y así poder pintar tranquilos y dejar que fluya el arte de nuestros peques 🙂
(Fotos vía: Pinterest, Puertas a la imaginación)